Translate

jueves, 21 de noviembre de 2013

La princesa y el guisante

Había una vez un príncipe que quería casarse con una princesa, pero con una auténtica princesa de sangre real.

El príncipe recorrió el mundo buscando una pero no lo consiguió, porque a pesar de que había muchas princesas casaderas, no halló a ninguna que le pareciera auténtica. Desolado, regresó a su reino.

Una noche de tormenta el príncipe y su familia oyeron de pronto que alguien llamaba.

–¡Toc, toc, toc!

Temerosos ante el extraño que podía estar a la intemperie en una noche de tanta lluvia, abrieron la puerta del castillo. Frente a ellos, vieron una muchacha muerta de frío y empapada de la cabeza a los pies.

–Soy una princesa – contestó con voz dulce y quejumbrosa. Me he perdido en la oscuridad y no tengo a donde ir esta noche.

La joven que decía ser princesa fue bien recibida en palacio donde le proporcionaron ropas secas y una suculenta cena.

Pero la reina no se fiaba de que fuera una auténtica princesa y se dijo:

– Sólo hay una forma de averiguarlo. Colocaré un guisante debajo del colchón de la cama donde va a dormir esta noche. Si no se da cuenta, es que no es una sensible y delicada princesa de verdad.

A la mañana siguiente, la familia real preguntó a la joven:

– ¿Qué tal has dormido?

– Pues para serles sincera, he dormido muy mal – contestó – Algo terriblemente duro y molesto no me dejó dormir y he amanecido con el cuerpo dolorido.

Alborozada, la reina exclamó:

– ¡Ciertamente, eres una princesa auténtica!… Sólo una princesa de verdad podría tener la delicadeza suficiente como para sentir un minúsculo guisante debajo del colchón.

Y así fue cómo el príncipe encontró una maravillosa princesa con la que casarse y ser feliz.

Tomado de: cuentosparachicos.com

Los dos ositos consentidos

http://www.youtube.com/watch?v=Sg8OxXaXl2Q&list=PL9224DFFFDA3D265B

La importancia de leerle al bebé desde que está en el vientre.

Leerle al bebé desde que está en el vientre fortalece el vínculo afectivo y fomenta este hábito.

Esta rutina es necesaria para desarrollar el intelecto y fortalecer el aprendizaje del niño.
La madre acaricia su vientre y lo cuida, con un gran instinto natural, durante el embarazo. También le habla a su pequeño, lo mima y, a veces, le canta. Todos estos sonidos el pequeño podrá percibirlos desde el cuarto mes de gestación, etapa en la que logra apreciar estímulos sonoros.
También le habla, le relata sus historias diarias y, ¿por qué no?, le lee un libro. Fascinantes relatos que, aunque el pequeño no los recuerde con precisión, van a comenzar a alimentar su lenguaje y le servirán, más adelante, para distinguir la voz de su madre.
“Hay una lectura anterior a la lectura de los textos escritos; es la lectura del texto oral. Este acto de lectura es inherente a la puesta en movimiento del pensamiento. Sabemos que el bebé viene al mundo con las capacidades que le permiten manejar las informaciones del mundo físico y las del vasto mundo de la intersubjetividad. La voz de la madre ya está inscrita en la psiquis del bebé cuando nace”, señala el investigador, psicoanalista y lingüista Evelio Cabrejo Parra en su artículo ‘La lectura comienza antes de los textos escritos’, en Nuevas Hojas de Lectura (septiembre-diciembre 2003).
Cuando una gestante lee…Crear un espacio íntimo de lectura entre la madre y el bebé permite que ella se relaje, tenga contacto con él y se involucre con su embarazo. Él, por su parte, irá fortaleciendo el vínculo con su progenitora. Según Magdalena Castillo Mantilla, especialista en infancia, cultura y desarrollo, corresponsable del proyecto ‘Crecer entre palabras y juegos’, de Fundalectura, “el bebé percibe la suave melodía del lenguaje literario que le permitirá al nacer fortalecer los vínculos afectivos con las voces de los adultos o niños significativos a la construcción de su propio libro”.
También, el pequeño empezará a conocer su lenguaje, a través de un ritmo específico de la voz de su madre o cuidador. Es decir, “antes de hablar de palabras, los lenguajes tienen una melodía. Así no entiendan el idioma, los bebés adquieren esta melodía y, cuando nacen, la entienden”, explica Claudia Díaz, directora del Montessori British School, institución que desarrolló una investigación sobre la lectura en la gestación.
¿Será buen lector?El gusto por la lectura se incentiva en cualquier etapa de la vida. No obstante, si se fomenta esta rutina, desde muy temprano, no solo favorece a que el pequeño se convierta en un buen lector, sino que se crea un espacio donde él podrá tomar iniciativas, demostrar sus capacidades y compartir en familia.
Por su parte, el investigador Evelio Cabrejo, en su artículo, señala: “…no leemos textos a los niños para que se conviertan en buenos lectores, sino porque sabemos que esas lecturas les permiten ubicar algo fundamental para ellos: el descubrimiento de que los textos son cosas que tienen un sentido, cantidad de sentidos y que cada sujeto debe  trabajar un poco para llegar a construir el sentido en su espíritu”. Y es que “no solo es enseñarles a leer; es que ellos tengan el hábito de leer para aprender. Que ellos vean que la lectura es una puerta abierta para la creatividad y la imaginación, una pauta importante para el aprendizaje”, agrega Díaz.

Tomado de: abcdelbebe.com

jueves, 14 de noviembre de 2013

I can't wait to go to bed


Read with your kids before go to bed

Cinderella


Nothing better than Cinderella story for start with the English

http://issuu.com/symbiosis06/docs/cinderella

The lion and the mouse



This is a story to start with the english, let's hear about the lion and the mouse

(Esto es para leer a partir de los 5 años en adelante)

¿Qué libros elegir antes del primer año?

Para bebés de hasta 4 meses


Lo más importante a esta edad es la creación del hábito. Elige un librito infantil corto y sencillo, de pocas páginas y palabras, con versos rítmicos, que puedas leer a tu hijo cada noche.



Para bebés entre 4 y 6 meses


A esta edad tu bebé mostrará interés en agarrar los libros y quizás hasta llevárselos a la boca. Elige libros confeccionados en tela o vinilo para la bañera, con colores brillantes y texturas en sus páginas.


Para bebés entre 6 y 12 meses

Tu bebé comenzará a comprender las imágenes que representan objetos en sus libritos. Elige libros de imágenes con temáticas, como por ejemplo los que muestran un animal en cada página, o un objeto de la casa, o una fruta. Si es un libro de animales, puedes hacer el ruido que cada animal hace y tu bebé irá asociando los sonidos con las imágenes.

El hábito de la lectura de libros infantiles es uno de las aspectos más enriquecedores de la vida, y puede comenzar en la primera infancia. No te pierdas de compartir libros con tu bebé acordes a su edad para ofrecerle este mundo maravilloso.

Tomado de: entrepadres.com